jueves, 30 de julio de 2020








QUERIDOS LECTORES:

 En CONCORONAPUESTA, publicamos 23 textos cuya finalidad era presentarles otra mirada de la realidad y algo de optimismo durante el confinamiento, a causa de la pandemia. 
Esperamos haber cumplido ese propósito, haberlos recreado y entregarles un mensaje distinto sobre alguna temática común.
Les agradecemos la lectura, los comentarios y la difusión que prestaron en este espacio creado por este periodo. Nos han gratificado con su presencia e incentivado a seguir escribiendo.


MUCHAS GRACIAS!

MÓNICA LACKINGTON Y CONSUELO CUBILLOS

domingo, 19 de julio de 2020

REINAS SIN CORONA

Por: Mónica Lackington F.



El tema de ser mujer hoy en día está “en primera línea”. Pertenezco a un grupo que quisimos ser “buenas en todo”… Me refiero a ser profesionales (con título universitario), esposas, madres e hijas. Al menos en mi familia lo de estudiar, no era transferible. Así es que, a pesar de una amplia variedad de carreras que me eran atractivas, estudié Pedagogía y opté por la especialidad en Castellano y no por Educación Física, por darle el gusto a mis padres. Con el tiempo, me he dado cuenta que no intenté plantear la posibilidad de estudiar otras disciplinas que me gustaban más, quizás por temor a una discusión, comodidad o, incluso, ambas.

La realidad, es que no me hacía gracia ser profesora, porque a mí no me agradaba para nada ir al colegio como estudiante, a excepción de que fuera por ver a mis amistades y algunos ramos. Fui educada en los ingleses, en ese ambiente de temor a la autoridad y alta exigencia, que me marcó para siempre. 

El medio académico sirvió para despercudirme de la rigidez británica y para disfrutar de cierta libertad que se vivía en los Campus. Prueba es que, en mis años de estudio, pasé por varios tipos femeninos: “artesanal”, de ojotas y morral de lana; “formal”, de vestido ceñido y tacos altos y “universitaria-chic”, calzando bototos, pantalones y blazer de tweed. 


Sin embargo, cuando tuve que trabajar (al cursar el tercer año), preferí imitar a mis propios maestros, me puse ad- hoc con lo que se esperaba de mí en un colegio particular, inglés y del barrio alto. 


Luego, el matrimonio vino a sumar un nuevo rol en donde había que demostrar las habilidades y virtudes, sin descuidar el quehacer laboral. Afortunadamente, en mi trabajo éramos muchas las que vivíamos lo mismo y teníamos que conjugar quehaceres en donde, a veces, el trabajo quedaba postergado. Era imperdonable (quizás aún lo sigue siendo) que uno desatendiera a la familia, el trabajo del marido, una enfermedad de los padres o hijos, la casa y, por ende, privilegiara el desarrollo particular. Teníamos que salir corriendo frente a cualquier eventualidad, pidiéndole a alguien que tomara nuestro lugar y a los jefes que comprendieran, porque en esos años, trabajar casi era una “gracia”. Nos sentíamos, eso sí, “empoderadas”, teníamos nuestros sueldos, aportábamos para los gastos y éramos bastante eficientes en todo, y ¡no exagero! 


Como estábamos orgullosas de ello, vacilábamos entre el modelo machista de nuestras madres y el moderno que no hemos terminado de parir aún en estos días. Por ello, nos sumamos a leyes maritales y tomamos algunas malas decisiones, con tal de fortalecer la imagen de “independientes”. Esto, ha costado que un sinnúmero de mujeres, prefirieran vivir separadas, movieran montañas por sostener a su prole y no recibieran amparo alguno de los ex compañeros, quienes se acostumbraron rápidamente a la fémina emancipada que tenía gestos generosos y cumplía con todas las exigencias de esos años.

Hoy en día, me alegra ver que mi género ha prosperado en ello y construyen un equipo con sus parejas en todas las tareas que involucra la convivencia y el tener proyectos comunes. Pero falta mucho por andar…


Ahora, en plena cuarentena, me toca escucharlas, con distintas edades y demandas: mi madre, que vive a la usanza de los tiempos en que se era “dueña de casa”, las más jóvenes que complementan mejor el desarrollo profesional - familiar con los procesos personales y las que fuimos de “transición”. Nosotras, hemos aprendido a priorizar, cometiendo muchos errores y viviendo los costos al intentar ser “heroínas”.

La experiencia, nos lleva a pensar antes de tomar deberes que no nos competen, delegar los que no deseamos hacer y moderar las exigencias. Preguntarnos, antes de decidir: si es que “quiero” o si es que “debo”. Muchas, pretendemos a diario lograr un equilibrio entre las responsabilidades y el cuidado de nuestra persona.

En esta epidemia, la mujer ha tenido que reorganizar sus actividades y espacios, intentando no padecer una vida aún más exigida durante el encierro.

Al menos para nosotras, las “del cambio”, esta pugna es algo cotidiano. A estas alturas, sin duda, hemos desechado el espíritu heroico. Lo más importante, es afrontar las obligaciones porque ellas se vuelven útiles, beneficiosas y nos reconfortan y, por otro lado, no descuidar los ámbitos que nos gratifican de aquello que es un deber.


Cuando logramos eso, que no es para nada fácil, nos sentimos tranquilas y contentas. Ciertamente, no necesitamos de una corona para recordar que:

¡ NO TODAS QUERÍAMOS SER REINAS !


lunes, 13 de julio de 2020

APRENDER DEL QUIJOTE...


Por Mónica Lackington F.




Cuando un hijo decide marcharse, es un asunto que estaba previsto, pero no por ello algo para lo que estábamos preparados. Estos pasos, se parecen a las salidas del Quijote, ya que no siempre están sustentadas en el sentido común o la lógica, incluso con la idea que nos habíamos hecho de ellos. 
Como a don Quijote, los mueve un deseo concreto: obtener la independencia y el ser individuos. Pero como a él, los remece una cuota de locura, que es el impulso para ser lo que quieren llegar a ser. 

Para los jóvenes, la primera salida de casa no es fácil, han debido dejar la comodidad y el cuidado, en pos de la aventura. Es una huida furtiva a aquello que amarra, pero que impide conseguir la propia identidad. 

 “Y así, sin dar parte a persona alguna de su intención y sin que nadie le viese, una mañana, antes del día, que era uno de los calurosos del mes de julio, se armó de todas sus armas, subió sobre Rocinante, puesta su mal compuesta celada, embrazó su adarga, tomó su lanza, y por la puerta falsa de un corral salió al campo, con grandísimo contento y alborozo de ver con cuánta facilidad había dado principio a su buen deseo.”



En la primera tentativa, Alonso Quijano, logra ser armado caballero, y luego de ser apaleado, es devuelto por un vecino a su hacienda, donde es atendido por la sobrina y el ama. Nuestro querido hidalgo, vuelve a recibir cuidados y la tutela del barbero y del cura de La Mancha, quienes proceden a quemar las novelas que llevaron al anciano al delirio. 





En su segunda tentativa, el Ingenioso contará con los consejos de Sancho, que representa la cordura, el sentido práctico, pero sin mayores anhelos. Esta vez, los acontecimientos serán fruto del choque de los deseos con la realidad, objeto de burlas y engaños. Ambos regresarán al pueblo de La Mancha luego de recibir golpizas y humillaciones.

Así, como si estuviésemos en la butaca de un teatro, debemos ver cómo nuestros herederos se van enfrentando al mundo, experimentan significativas y dolorosas vivencias y, bajo su propio convencimiento, llegan a considerar algunas de nuestras opiniones. Regresan cabizbajos, pero poco a poco vuelven a forjar una nueva puesta en escena, donde, sin duda, quieren ser protagonistas de su verdad. Quisiéramos que perduraran en su quijotismo, sin perder el pragmatismo de Sancho.




En el tercer y último intento, tanto el escudero como el de la Triste Figura, ven claros sus objetivos. Cada uno ha tomado del otro lo que necesitaba. Sancho ha aprendido a tener ambiciones y el caballero, más sentido común. Todo acaba, luego de muchas peripecias, cuando regresan a su aldea a cumplir un acuerdo (en el que también han sido engañados) que implica no salir durante todo un año. Sin embargo, don Quijote, desiste del interés en hacerse pastor y decide no volver a intentarlo.

-¡Ay!- respondió Sancho, llorando-. No se muera vuesa merced, señor mío, sino tome mi consejo y viva muchos años; porque la mayor locura que puede hacer un hombre en esta vida es dejarse morir, sin más ni más, sin que nadie le mate, ni otras manos le acaben que las de la melancolía”.



Así como estos personajes ejemplares, los hijos van haciéndose dueños de su vida, luchando por seguir de pie ante los proyectos y no deprimirse por las dificultades.

Como ellos, nos hemos vistos obligados a cumplir un confinamiento, dejar nuestros planes y rutinas de lado, cuidar la salud y la de los demás, igualmente,  aprender a vivir en la incertidumbre y  prepararnos para las dificultades venideras.Debemos tomar su ejemplo en no claudicar de nuestros propósitos, aún cuando nos parezcan difíciles, volver a despertar el entusiasmo que es lo que nos mantendrá vigentes.

Antes de que podamos volver a “salir” sin restricciones, es necesario no dejarnos abatir por la tristeza, preguntarnos de qué nos ha servido a cada uno todo esto...  

 ¡Así el sacrificio y el sufrimiento de tantos no podrán haber sido en vano!  










domingo, 21 de junio de 2020

PALABRAS DE VERDAD




Por: Mónica Lackington F. 


Desde pequeña me gustó escribir, quizás imitando a Ana Frank, cuyo libro me impactó muchísimo. Sea o no por ella, en mi infancia, se ansiaba tener un diario de vida para poder registrar nuestros secretos o asuntos personales. Estaba descartado el recurrir a un desconocido para contar lo que nos preocupaba. Era frecuente escribirnos con las amigas y seres queridos tarjetas, cartas, notitas en papelitos, por lo cual el redactar acorde con lo que se deseaba comunicar, era esencial.





A través de este ejercicio, me fui dando cuenta de qué me afectaba y la reacción de los demás frente a mi conducta. Así podía evaluar las situaciones como lectora y ser más objetiva en mis juicios. Con el tiempo, fui creando mis propios diarios de vida que eran cuadernos escogidos en donde iba ilustrando los acontecimientos con fotos, recortes de revistas y hasta mis propios dibujos. También, en ellos se podían pegar objetos que servían de recuerdo o “prueba” de que cuanto se registraba allí, era cierto (servilletas de alguna fiesta, tarjetas, fotos, trozos de papel de regalo, entre otros) …





Más tarde, tuve la idea de escribirle un Diario (que aún conserva) a mi mejor amiga que se iría a vivir a Venezuela, definitivamente. Allí le describía, desde que supe que dejaría Chile, mis inquietudes y puntos de vista frente a lo que vivíamos juntas, lo que compartíamos en el colegio, con las amistades que teníamos, cómo iba siendo testigo de la rutina que estaba deshaciéndose y de la que estaba armándose para su nuevo destino; también volqué en esas páginas la tristeza por su partida. Como éramos quinceañeras y teníamos cierta independencia, la acompañé a hacer compras, trámites, entre mil otras cosas, porque éramos verdaderamente “compinches”. Se lo entregué pocos días antes de que se fuera, porque no podría ir a Valparaíso a dejarla al barco, aunque me hubiese gustado hacerlo. No había espacio en el auto que los llevaría y, me imagino, que no había otro medio de realizarlo o bien preferí, por cuidarme, no hacerlo.

Después, acordamos que, como las cartas se demoraban muchísimo en llegar, ambas incorporaríamos este sistema de comunicación (junto con el epistolar) y así seguiríamos viviendo la cotidianeidad desde la distancia, con la esperanza de que algún viajero llevara los cuadernos al destinatario.

Ahora, la misma buena amiga, me ha confesado, que usó esta estrategia cuando estaba de novia con su marido y que causó en él una memorable impresión, o más bien, terminó por conquistarlo.

Hace tres años realicé un Máster en España de Terapia Familiar y el tema de mi tesis fue: “Entender, crear y liberar por la palabra”. Leí algunos estudios sobre la tendencia de la Psicología en utilizar la escritura con fines terapéuticos, como también la importancia del relato verbal en la Terapia Narrativa.

La necesidad de contar lo que nos ocurre, el darnos tiempo para desarrollar nuestra historia, ser escuchados con atención y su consecuente beneficio, no es nada nuevo para cualquiera de nosotros. A veces sólo con narrar, nuestra percepción sobre lo que nos preocupa, se modifica, nos sentimos aliviados, comprendidos y esperanzados.

Reconozco que presenta cierta dificultad el poner una experiencia por escrito, que encontrar la forma y ser fiel al fondo no es cosa simple, requiere de tiempo, esmero y dedicación.




En estos tiempos, la palabra que ha vuelto a tener relevancia y se hace protagónica en algunas redes sociales, dista mucho de la cual hago referencia. La testimonial nace de la humildad y la confianza, se preocupa del discurso, no busca la valoración en la exposición de su verdad. Su riqueza radica en el ejercicio creativo, sin ambiciones: poner en palabras…

Ahora que hemos vuelto a compartir tiempos de silencio, temor, a tener que vivir muchas horas en el mismo espacio, es momento de ejercitar nuestra palabra. 

Escribir, si no me atrevo a comunicarlo verbalmente, compartirlo, si siento que mi verdad puede encontrar eco en los otros, esforzarme por recuperar la comunicación respetuosa, empática y ¿por qué no?, poética. 

Así como nos lavamos las manos para evitar traer el virus a nuestras casas, debemos abrirnos a la palabra sanadora que se basa en un relato cuidado, delicado, también provisto de belleza y amor. Si no es para los demás, será para nosotros mismos… ¡Porque la palabra, bien usada, ¡Créanme!,

¡JAMÁS NOS DEJARÁ INDIFERENTES!





miércoles, 10 de junio de 2020

¿Cuántos metros de felicidad necesito?

Por Consuelo Cubillos F. 


Apesar De Vocé, Chico Buarque retumba en mi cabeza, mis audífonos de Bomba Shell rosados a punto de reventar, no son rosados por azar… amo el rosado a mis 45 años y ¿qué? 

Hoy les quiero compartir mi experiencia y, entrando nuevamente en el tema del encierro y lo apretado que se me hacen mis 80 y algo mts2 de departamento, he ido acumulando tips para sentirme mejor. Son consejos de amistades que me quieren y saben que la claustrofobia me tiene loca y que, sin apoyo, no paso esta cuarentena. Dentro de los muchos que he recibido, hice una selección de los que pueden servirnos a todos: 

Conecta con tu cuerpo: aquí es donde yo no le hago mucho … Practicar yoga para los más elongados, bailar hasta desfallecer, hacer ejercicio de cualquier tipo (de cualquier tipo, chicos, eso incluye las artes amatorias) y respirar profundo. ¡Dentro de éstas, la verdad, es que le he hincado el diente al baile, la respiración y los ejercicios de alcoba. 

Cuida cuerpo y alma: dentro de esta categoría entra, por supuesto, el alejarse del televisor a las horas de matinales y noticias, ojalá desconectarse de rrss y, si lo vas a hacer, que sea solo para compartir buena energía. Tratar de meditar a diario, a pesar de la dificultad de concentración que a varios nos ataca. Ser austero y ahorrar para tiempos más inciertos, usar ropa cómoda y relajada, comer saludable, tomar un poquito de sol, distraerse con música, series, podcasts, buena lectura descubriendo nuevos narradores, poetas y cronistas y por supuesto acompañarse del mejor Blog ¡Con Corona Puesta!


Ejercita el amor y la empatía: llamar a amigos y familia (hacerse acompañar por gente positiva a la distancia es lejos la mejor terapia) abrazar (si puedes) a tus amores y acariciar a tus mascotas (yo tengo a mis bendiciones canina y felina que llenan mi vida). 

A veces ayuda pensar en situaciones peores y agradecer por la vida que tenemos, por la familia que formamos y por tener la posibilidad de estar en casa, luego hacer el ejercicio de mirar a tu alrededor y ayudar alguien que lo necesite. Para finalizar este ítem, comentar experiencias positivas en redes sociales (a mí me ayuda mostrar mis preparaciones a lo Master Chef, compartir mis escritos y recordar tiempos pasados con fotos de mi infancia) y evitar las lamentaciones y comentarios angustiosos, aunque los sintamos.  


Ocúpate: (¡Uf! Aquí hay una mega categoría porque entraría cualquier labor, desde el teletrabajo hasta las tareas de la casa). Tejer, bordar, hacer manualidades, ordenar, hacer aseo, cambiar al clóset de invierno y deshacerse de aquellas prendas eternamente guardadas, para cuando adelgacemos… Cocinar, hacer un puzzle, realizar tareas monótonas y terminarlas. ¡O-CU-PAR-SE!

Date licencias: ¡ésta es la mejor!… aquí sí que me las he dado todas. Hacer fiestas, las he hecho con mi hija, marido, prima que vive en el piso de abajo y es híper alegre y mi sobrina estudiante con quien pasamos la cuarentena. Lo hemos pasado chancho (sin molestar a nadie eso sí), hacemos comidas todos los fines de semana y lo hemos disfrutado a mil. Si están solos, hacerla igual, a distancia, por zoom, como sea. Comer chatarra y no arrepentirse (no siempre, la idea es que sea de vez en cuando), embriagarse con moderación, sentirlo todo, llorar si quieres, hacer absolutamente nada si así lo deseas y soltar la culpa. 

En fin, aquí les comparto mi maxi terapia, con esto más el trabajo que no es poco, mantengo mi vida “a raya”. No está siendo fácil para nadie pasar una buena cuarentena. Los que estamos acompañados nos quejamos por el exceso de compañía, los solitarios por la soledad y ¿quién tiene la receta mágica para sobrellevar la pandemia? ¿Cuántos son realmente los metros cuadrados de felicidad que necesitas? En mi caso lo que mide mi computador. 

lunes, 8 de junio de 2020

DULCE-MENTE


Por Mónica Lackington F.

Hoy he acompañado a mi madre otra vez, en total cuarentena. Un dolor en la cadera le impide levantarse y apenas, caminar. Está sola y el peligro de una caída y sus consecuencias serían trágicas a sus 92 años. 

Para distraerla, le propongo que llamemos a sus hermanos: Carmen (85), que vive en Canadá, encerrada también por las circunstancias. Ésta, nos responde que se ha entretenido enmarcando una foto antigua de su madre, Hortensia*, y en redistribuir algunas cosas dentro de su departamento.




Le explico que acá, en Chile, estamos acercándonos al “peak” del contagio y luego de ello, comenzaría el descenso de la curva, que tanto anhelamos todos...

Me pregunta:” - ¿Cómo se sabe eso, Monita? - “

Como a un niño. le relato la historia con un final feliz. Cambio de tema y le pregunto si está cosiendo otra vez y me explica que se ha hecho una falda. Agrego, que cuando pase esto, podré enviarle algunos moldes que venden en Independencia, un barrio de Santiago, en donde hay de todo para ese oficio. Se alegra por mi ofrecimiento e imagino, que disfruta la idea de conocerlo conmigo, en un viaje próximo. 

Luego, invito a mi madre a comunicarnos con su hermano menor Óscar* (80), con el que tiene más de diez años de diferencia, pero más cercanía, ya que vive a unas cuantas cuadras. A pesar de ello, no lo vemos ni hablamos con él desde marzo. Le extraña nuestro llamado, pero se alegra…



Tiene más percepción de lo que ocurre en su entorno. Declara, indignado, que está sin poder asomarse a la puerta, impedido de hacer diligencias y transitar como un capitalino normal. Como es un hombre culto, abogado y aficionado a la Historia, me parece que se siente en un ambiente bélico, inmoral y, definitivamente, como un condenado a cadena perpetua, siendo inocente. Finalmente, confunde algunas palabras y lugares que no puede precisar. Además, durante el transcurso de la conversación, percibo que ha ido perdiendo claridad con respecto a quiénes estamos al otro lado del teléfono. Sin embargo, cuando insisto que lo volveremos a llamar y que pronto podrá venir a almorzar con su hermana, su voz se suaviza, toda la angustia previa pierde fuerza, recibe la propuesta encantado y, finalmente, se calma.

Mi madre, mientras, escucha ambos diálogos, interviene con algunas palabras de cortesía, pero deja que me haga cargo de conducirlos por esta neblina de acontecimientos insólitos, en donde buscan ciegamente cierta luz de cordura. 

Gaby, a pesar de ser la mayor, está menos sola, quizás más lúcida e informada, aunque, olvida con frecuencia el entorno siniestro en el que vive. Me pregunta qué voy a hacer cada día, si veré a mis amigas, adónde saldré… Le insisto que todos estamos desprovistos de libertad para actuar como quisiéramos. 

Me inquieta saber si es que sus mentes son incapaces de comprender este mundo enfermo o si, al ser tan devastadora la realidad, los defiende así de la amenaza agresiva y hostil…

Nosotros no podemos conectarnos con ellos en la crudeza de los hechos cotidianos, pero recibimos sus palabras y gestos cariñosos. Vamos quedándonos fuera de su mundo, y ellos resguardados de entender lo que nos está pasando…

En fin, no tengo respuestas. 

Sólo sé que me conmueve la dulzura de estas tres voces que no se quejan más que otros, están más acostumbrados a las pérdidas, la incertidumbre del futuro y la cercanía de la muerte. Sin embargo, su intelecto sabe bloquear lo dañino y entender el lenguaje que vale la pena rescatar, el que posiblemente sabremos preservar de cuantas crisis sufra esta Humanidad, … el del AMOR.

lunes, 25 de mayo de 2020

¡OPORTUNIDAD ÚNICA! Guía para el #DíaDelPatrimonioEnCasa

Por Consuelo Cubillos F. 


Dentro de todo lo que hemos pasado como sociedad en estos meses de confinamiento y cuarentena, lo más difícil para todos ha sido no tener la oportunidad de salir y recorrer la ciudad, vivirla como antes lo hacíamos, ya sea haciendo trámites, trabajos o simplemente por el gusto de hacerlo. Los que me conocen saben que mi gran pasión es el Patrimonio y dentro de mis prioridades de vida y objetivos, están el aprender y visitar la mayor cantidad de lugares que me entreguen conocimientos sobre el pasado y los fundamentos de nuestra nación, en lo económico, social, arquitectónico, de diseño y estructura de las ciudades. Es por esto que le cuento que se aproxima el día más importante del año para esta fanática, el Día del Patrimonio Cultural de Chile.  La ocasión me tiene extasiada y muy curiosa por cómo se llevará a cabo un día de recorrer, palpar y vivir en carne propia el valor cultural del país. 

Esta es una fiesta , que se celebra desde 1999, en sus inicios se llevaba a cabo el último domingo de mayo y desde hace algún tiempo, el último fin de semana de este mes. Se celebra anualmente y convoca a miles de personas a participar de forma gratuita con una amplia oferta de actividades patrimoniales. Debido a la situación de emergencia sanitaria del país y del mundo, el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, decidió continuar con esta tradición e impulsó una versión virtual, para experimentar desde el encierro, llamada #DíaDelPatrimonioEnCasa, y se llevará a cabo este viernes 29, sábado 30 y domingo 31 de mayo. 

Para que se hagan una idea de la gran oferta cultural que implica una celebración como ésta, les comento que hay más de 749 actividades divididas en las tres zonas del país (norte, centro y sur).  Esta, amigos, es una oportunidad única.  Hace muchos años que tengo la costumbre, de un mes antes del Día del Patrimonio, revisar, analizar y trazar una ruta acorde a mis intereses del momento, y me planifico para aprovechar al máximo esos 3 días, con el fin de aprovechar al máximo el tiempo, así, me lanzo a recorrer Santiago. 

A continuación, les dejo mi selección de los Top 21 (son muchísimos y me llevó horas elegir), subdivididos por: 
Recorridos virtuales
Exposiciones
Lanzamientos audiovisuales y publicaciones. 
En cada uno encontrarán el nombre e institución realizadora y su link para que, al ingresar directamente a las actividades, (tienen los horarios y fechas), puedan asistir sólo  pinchando el botón Acceder a la Actividad. 

¡Anímense! Este es un IMPERDIBLE de la Cuarentena. A continuación, les dejo mis favoritos: 


RECORRIDOS VIRTUALES 


Visita al depósito / Museo de Artes Decorativas 

En esta ocasión se compartirá un video para conocer los depósitos del museo y el trabajo que realizan las áreas de colecciones y de conservación. Este video estará disponible en Instagram desde el sábado 30 de mayo. 

   


#CasaPatrimonio / Museo de Química y Farmacia Profesor César Leyton. 

#CasaPatrimonio es una sección en la que se da cuenta de una investigación a la "Casa Nieto" donde se encuentra el Museo, ya que se está realizando una proyección de mejoras de este espacio patrimonial, proyecto financiado por el Servicio Nacional de Patrimonio.




Tour 360° Los pasillos y exposiciones del Palacio Schacht / Fundación Cultural de Providencia. 

Se realizará un recorrido virtual 360° por el Palacio Schacht donde podremos apreciar dos exposiciones de fotografía: "Providencia, una mirada. 40 años bajo el lente de Patricio Casassus” y "Contracuerpo" de Cristián Aninat con una experiencia al interior de la Gala Internacional de Ballet de Providencia.




Árboles Patrimoniales e Históricos del Parque Quinta Normal / Sociedad Formación ambiental.

La actividad consiste en un recorrido por el Parque Quinta Normal en el que se explica el origen y características de los árboles más antiguos del Parque, su valor patrimonial y el contexto histórico de Santiago cuando fueron plantados, entre otros aspectos.



Palacio Larraín: “Un viaje en el tiempo a la Belle Époque” / Palacio Larraín 

Viajar en el tiempo no es un sueño, José Antonio y Sofía harán posible este viaje a 1913, al interior del Palacio Larraín Macheño. Una antigua mansión de la Belle Époque santiaguina, será una entretenida experiencia para chicos y grandes. La transmisión será en vivo vía Instagram. 





Recorre la ciudad a través de los cuentos de “Santiago en 100 palabras” / Santiago en 100 palabras 

Descubre rincones de Santiago a través de 100 cuentos georeferenciados en más 20 comunas. Estas historias escritas por ciudadanos relatan anécdotas situadas en icónicos lugares, como Cementerio General, el Estadio Nacional, La Vega Central, la Plaza de Armas el Paseo Ahumada, entre otros.



Descarga la app Recuperando Patrimonio / Subsecretaría de desarrollo regional y administrativo. 

Durante la celebración del Día del Patrimonio Cultural, podrán descargar en Play Store la App "Recuperando el Patrimonio de Chile" para hacer recorrido virtual en los principales inmuebles restaurados.

Además puedes hacer recorridos 360° en la web www.recuperandopatrimonio.cl de la Subdere. 



Paseos chimbanos, Caminar la Historia / Universidad San Sebastián

Descubrir La Chimba, el primer barrio de Santiago. Un aporte cultural y educativo para la comunidad, una ruta patrimonial en los barrios Bellavista, Patronato antiguamente conocidos como La Chimba. 




EXPOSICIONES  


Exposición Mujeres: ideología e imagen / Biblioteca Patrimonial Recoleta Dominica. 

Vídeo sobre la exposición temporal Mujeres: Ideología e imagen. Muestra de libros y revistas que nos muestran el imaginario del género en el siglo XX, y su configuración en la sociedad chilena.



Historia de la moda 1900-1930 / Isidora Eduardiana & Co. 

Moda y cultura, repasaremos la moda e hitos de 1900 a 1930 con vestuarios y accesorios expuestos en maniquíes y personajes caracterizados a la usanza de la época.

Programación
Viernes 29: moda 1900
Sábado 30: moda 1910
domingo 31 moda 1930

Será una tarde muy interactiva para todo público.



Exposición La Taza / Museo de Artes Decorativas 

Esta exposición, tiene por objetivo mostrar la colección de tazas del museo y visibilizar la extensa y profunda investigación que se realizó, para dar cuenta de manera precisa de su origen, manufactura y uso, a nivel histórico y cultural.





Tres muestras de fotografía y recorrido virtual / Corporación Cultural de Las Condes

Exposición “El Santiago que se fue”, “Sobre Chile” MUI Las Condes, Muestra “Sergio Larraín. El Fotógrafo invisible” y Tour 360 colección de pintura chilena casa-museo Santa Rosa de Apoquindo. 




LANZAMIENTO PUBLICACIÓN 


Archivo Digital GAM / Centro Cultural Gabriela Mistral. 

Se lanzará el Archivo digital de arte y arquitectura de la UNCTAD III, una plataforma digital de consulta y de acceso gratuito que contiene más de 600 archivos patrimoniales de interés público sobre el edificio que hoy alberga al GAM.



Arquitectura tradicional chilena, libros digitales completos para ver y disfrutar / Archivo de arquitectura chilena del Instituto de Historia y Patrimonio de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo Universidad de Chile. 

Libros en formato digital libres de descarga. 

Revisan y estudian diversas expresiones de la arquitectura tradicional chilena y otras.

Resumen las investigaciones de académicos y alumnos de Arquitectura FAU UCHILE y que ya no están en circulación, contienen planos y fotografías.



Fanzine: Ruta fotográfica patrimonial del Barrio República / Museo de la Solidaridad Salvador Allende MSSA


Descarga el fanzine realizado por la Brigada Fotográfica MSSA para la ruta patrimonial del barrio República realizada en 2019. Junto a vecinas y vecinas del barrio fotografiaron e investigaron en torno a distintos lugares significativos y construcciones patrimoniales.








LANZAMIENTO AUDIOVISUAL  


Historia del galpón de Los Reyes / Agrupación de Anticuarios Galpón de los Reyes 

Historia del Galpón de los Reyes desde sus inicios como parte del sistema de transporte público y depósito de los tranvías de Santiago, hasta llegar al día de hoy como el principal centro de antigüedades artes y oficios de Santiago. Lanzamiento el 29 de mayo del 2020.



Habitando el Barrio: mi historia / Fundación Larraín Macheño 

Montaje audiovisual que contiene recuerdos, reseñas y memorias contadas a través de fotografías y dibujos, que se han armado de tal modo de transmitir un relato familiar propio.



CHARLAS Y CONVERSATORIOS  


Top 10 esculturas de Santiago / Santiago Cityscape 

Nos invita a celebrar el día del patrimonio cultural en casa en un conteo virtual a través de su propia selección de 10 esculturas de Santiago y sus autores. 



Mujeres chilenas que marcaron historia / Santiago Cityscape

Únete a un espacio virtual de conversación sobre 7 mujeres chilenas que marcaron historia y celebra con Santiago Cityscape el día del patrimonio cultural en casa. 







Demostración en vivo de acuarela arquitectónica Gonzalo Ibáñez / Fundación Cultural Casa de los Diez. 

En esta demostración técnica, el acuarelista Gonzalo Ibáñez realizará una acuarela arquitectónica de principio a fin. En esta actividad en vivo podrás ver aspectos técnicos del oficio y al mismo tiempo interactuar con el acuarelista con dudas o comentarios. 






Con esta selección de actividades los invito a buscar las que más les interesen, tienen tres días para disfrutar de las joyas del patrimonio de nuestro país, completamente gratis y desde la comodidad de sus casas. Pueden entrar en https://www.diadelpatrimonio.cl/ y buscar la gran oferta cultural que entregan a lo largo de todo Chile. 

¡Que el encierro y la cuarentena no sea un impedimento para conocer y aprender de nuestro Patrimonio, esta es una oportunidad  que hay que aprovechar y que no olvidarán!